Separación matrimonial barata
Separación matrimonial barata:
El proceso de separación matrimonial y de divorcio en su funcionamiento son muy similares.
Por ello, la información relativa al tipo de procedimiento, trámites, plazos y demás cuestiones son asimilados.
El precio de una separación matrimonial en nuestro despacho es igual de barata, el mismo precio que el proceso de divorcio.
El coste de una separación matrimonial en nuestro despacho es el más ajustado y económico, final y cerrado incluyendo abogado y procurador:
- 150 euros en los casos de divorcio judicial de mutuo acuerdo con hijos menores.
- 100 euros en los casos de divorcio judicial de mutuo acuerdo sin hijos menores.
Los precios de separación matrimonial en nuestro despacho de abogados intenta facilitar el acuerdo, no fomentamos el juicio de divorcio, sino la separación razonable y justa para todos los miembros de la familia.
A pesar de ello, si que cabe indicar una serie de diferencias en cuanto a los efectos de la declaración de separación matrimonial y divorcio.
A continuación de manera práctica lo pasaremos a exponer.
Diferencia entre divorcio y separación matrimonial:
La principal diferencia entre la separación matrimonial y el divorcio, es que en el caso de la separación se suspende el vínculo matrimonial, mientras que con el divorcio se disuelve.
En la separación matrimonial se paraliza, suspende, bloquea, congela el matrimonio pero sigue existiendo.
En cambio con el divorcio el matrimonio finaliza de manera definitiva.
El matiz y la diferencia entre la separación y el divorcio es muy importante y como desde 2005 es posible acudir directamente al divorcio sin pasar por previa separación, hay que tomar la decisión de manera consciente.
Nuestro despacho de abogados recomienda que en los casos en los que la ruptura sea definitiva se proceda a la tramitación de divorcio.
En los casos en los que la ruptura no sea definitiva, se puede optar por una separación de hecho (sin tramitar nada) o formalizar la separación matrimonial, pero nuestro consejo es que si los cónyuges no lo tengan claro, esperen a aclarar sus ideas y cuando sea definitivo que tramiten directamente el divorcio.
Separación matrimonial y divorcio son diferentes, pero se pueden desprender múltiples conclusiones de un proceso y otro:
Volver a casarse después de separarse o divorciarse:
Para poder volver a casarse es necesario estar divorcios, no es suficiente la separación.
¿Por qué?
El motivo es por disolverse el matrimonio con el divorcio pero en cambio no con la separación, con la que el matrimonio sigue existiendo.
Por tanto la diferencia práctica a los efectos de volver a contraer matrimonio, una persona separada no podrá volver a casarse, pero una persona divorciada sí.
Reconciliación matrimonial:
Para tramitar un reconciliación matrimonial será imprescindible estar separados, pues los divorciados ya terminaron su vínculo matrimonial y por ello no es posible la reconciliación matrimonial.
Por tanto, un matrimonio divorciado que se ha reconciliado, no tendrá posibilidad tramitar un proceso de reconciliación, tendrían en todo caso que volver a casarse o convivir como pareja de hecho.
Por ello, el divorcio es una situación definitiva, mientras que en el caso de la separación, caben tres posibilidades:
- La reconciliación matrimonial: En este caso ambos cónyuges manifiestan su voluntad de retornar a su matrimonio y este vuelve a ser efectivo, eso sí, en régimen de separación de bienes con independencia de cual fuera su régimen económico antes de la separación.
- Mantener la separación: Es posible no hacer nada después de la separación y mantenerla hasta el fallecimiento de alguno de los esposos, momento en el que evidentemente acaba el matrimonio.
- Optar por el divorcio: Es posible que después de la separación matrimonial se tramite un divorcio, con independencia de que sea amistoso o contencioso, pues en ningún caso se consigue el divorcio por el paso del tiempo después de la separación.
